En 2001 el bretón Yann Tiersen tenía ya una respetable carrera musical a sus espaldas pero más allá de su país, pocos lo conocían. Ese año Amélie, la película de Jean-Pierre Jeunet fue un auténtico bombazo y con ella su banda sonora firmada precisamente por Tiersen. Tenía difícil sobrevivir a un éxito así que, además, se apartaba de sus trabajos habituales. No solo ha conseguido sobrevivir, sino que ha podido enterrar ese recuerdo y acercar su música a un público mucho más amplio. Su música minimalista, etérea, está muy próxima a la naturaleza. Hay mucho de ese carácter frío bretón, introspectivo y magnético en las piezas instrumentales de este compositor incuestionablemente hábil, dotado para armar sus obras a partir de patrones melódicos mínimos y para resultar evocador a cada compás. El creador de las bandas sonoras de Amélie o Good Bye Lenin! sigue sirviéndose en directo de piano, violín, melódica y acordeón, junto a Émilie Tiersen, Jens Thomsen y Ólavur Jakúpsson, quienes se encargan de los sintetizadores, campanas tubulares, armonio y xilófonos. Con ellos trasladará al Auditorio Paco Martín la belleza cegadora de discos como Kerber (2021) y su nuevo álbum “11 5 18 2 5 18”.